Con el asentamiento del 4K y la estandarización del Full HD, nuestros archivos de vídeo han visto como han aumentado su peso (aunque los nuevos códecs cada vez logran almacenar más calidad en menor cantidad). Así pues, es probable que en ocasiones tus ficheros multimedia sean tan grandes que no puedas emplearlos para algún menester, con lo cual te veas obligado a comprimir ese vídeo para reducir su espacio. Pero… ¿Cuál es la forma más cómoda?
Sí, hay muchas páginas web que te prometen reducir reducir el tamaño del vídeo de forma online pero ya te lo adelantamos; no pierdas el tiempo. Cada una está limitada por alguna parte: archivos como máximo de 500 MB (o menos), otra sólo acepta ficheros Mp4, otras te meten una marca de agua en el vídeo… Así que en esta entrada te traemos el que creemos que es el mejor método para mantener la calidad de los vídeos pero por mucho menos espacio.
La forma de comprimir un vídeo online siempre ha estado delante nuestro: subiéndolo a YouTube
YouTube tiene uno de los sistemas de compresión más interesantes de todo internet: es rápido y la calidad no se ve tan reducida para la gran cantidad de megas que recorta. Aunque no queramos hacernos youtubers, sí que podemos aprovechar la plataforma de vídeo para nuestro propio beneficio colgando el vídeo en privado y luego descargándolo. Además es gratis, sin límite de tamaño de archivo ni duración, sólo necesitas una cuenta de Google -que a estas alturas seguramente ya tengas- y no deja marca de agua incrustada en el vídeo.
Si te interesa probar este método, sigue estos pasos desde un ordenador (o activa la vista de PC en el navegador de tu móvil):
Dentro de YouTube (y con la sesión iniciada), haz clic en Crear vídeo o publicación y luego en Subir vídeo. Esto lo encontrarás en la esquina superior derecha de la pantalla.
Arrastra el vídeo en cuestión o selecciónalo navegando entre carpetas.
El vídeo se comenzará a subir y como no queremos que lo vea nadie, en el apartado Visibilidad le damos a Oculto. También tendremos que establecer si el vídeo está dirigido a un público infantil o no en el primer apartado, el de Detalles; seleccionaremos que no para que nos deje avanzar. El resto de detalles no son relevantes en este caso. Eso sí, cuando acabes dale clic en Guardar.
Una vez se haya subido, el vídeo se comenzará a procesar (y tardará más o menos dependiendo del peso y duración del mismo). Lo encontraremos en el YouTube Studio (clic en tu foto de perfil en YouTube), en la columna vídeos. Cuando se termine de procesar, hacemos clic en el icono de tres puntos.
De entre las varias opciones se revelará Descargar, a la cual haremos clic. Ojo, porque si el vídeo no está procesado completamente todavía no aparecerá esta función.
Al tocar en Descargar, el vídeo se guardará en la carpeta de descargas que tengamos definida, o bien puede que se abra en una pestaña nueva a pantalla completa. Si es esto último, haz clic derecho en el vídeo y dale a Guardar vídeo como…
Luego puedes eliminar el vídeo de YouTube si no te apetece tenerlo subido en la plataforma.
Y como puedes ver en la siguiente captura, la compresión es verdaderamente profunda.
No obstante, si abres ambos vídeos apenas notas la diferencia de calidad; evidentemente el de YouTube ha perdido algo de bitrate, pero si lo querías para enviar por WhatsApp, la diferencia será inapreciable. Básicamente porque WhatsApp luego aplica su compresión… y esa sí que es bestia.
En resumidas cuentas, para nosotros esta es la mejor forma de comprimir vídeo online y sin suscribirte a nada. Respeta, dentro de lo que cabe, la calidad general del vídeo, la resolución y la compresión es altísima.